Fotografía de Andrés Lemus.
Mar de Piratas
Fenómeno meteorológico llamado Mar de Piratas, ocurría en el municipio de Garachico en abril de 2013.
Una espesa niebla que provenía de sus costas, daba una estampa parecida a la de las películas de Piratas o Corsarios que vemos en la televisión.
Aprovechamos estás imágenes, para conocer un poco de la historia de la piratería en Canarias.
Garachico también sufrió de estos asaltos de piratas. Su antiguo Puerto, antes de ser sepultado el 5 de mayo de 1706 por la erupción del volcán de Trevejo, era el más importante de la isla de Tenerife entre los siglos XVII y XVIII.
Se trataba de un puerto comercial con intercambios regulares de mercancías con destino a América y Europa.
La piratería en las Islas Canarias se desarrolló debido a su situación estratégica como puente comercial entre Europa, África y América y cruce de rutas marítimas.
El auge de la piratería estuvo asociado al descubrimiento y posterior explotación de América, y a los conflictos entre las grandes potencias.
Aunque en teoría se considera que los piratas están fuera del control de cualquier nación, esto no significa que no puedan ser controlados y protegidos. A veces los corsarios pueden ser confundidos con piratas porque también se dedicaban a la piratería.
Canarias y las Azores se convirtieron en lugares estratégicos en las rutas marítimas de Europa, América y Asia (en la ruta hacia el Océano Índico bordeando África).
Las riquezas y las especias de las tierras recién descubiertas en América fueron un gran botín para los piratas. Cuando estos tesoros americanos desembarcaban en islas como las Canarias o las Azores de camino a Europa, la piratería no tardó en surgir cerca de esas islas.
Esta ubicación estratégica también significaba que los barcos con destino a América pasaban por estas islas en su camino para abastecerse de agua, alimentos y otros suministros.
Los piratas que actuaron en Canarias eran de todas las nacionalidades, pero principalmente fueron ingleses, franceses, berberiscos y de los Países Bajos.
Desde los primeros años de la conquista, se produjeron ataques destinados a saquear y capturar indígenas guanches para la esclavitud.
Los berberiscos atacaron los asentamientos europeos y americanos en represalia por haber sido atacados por los europeos. Cuando se adentraron en la costa de África para asaltar las ciudades costeras, España, Francia y otros países se encontraban en su punto más alto. Estos piratas eran franceses que no se conformaban con sus barcos, sino que también asaltaban ciudades en tierra.
Los primeros piratas, que recorrían las costas para asaltar los asentamientos y las caravanas en busca de bienes valiosos, solían ser vistos como una fuerza perturbadora por aquellos a los que se dirigían. Más tarde, durante el reinado de Felipe II en España (y tras la muerte de su esposa María Tudor), los piratas ingleses asaltaron las costas españolas debido a la gran animosidad existente entre Inglaterra y España.
En los últimos años del siglo XVI, los holandeses se sumaron a esta actividad.
En el siglo XVII aumentó la piratería en las Islas Canarias. Sin embargo, los piratas eran mucho más propensos a atacar en épocas de debilidad y agitación para España, como las guerras con Francia y Flandes.
La Capitanía General se creó para hacer frente al problema de la inseguridad en la región, no sólo para navegar por las islas sino también por los ataques de los piratas.
Una serie de ingenieros llega para dotar a las costas canarias de torres y castillos que ayuden a defenderlas de los piratas y otras fuerzas enemigas.
Las torres defensivas o castillos destacan; San Andrés, San Cristóbal, Garachico, San Felipe y el Castillo Negro en Tenerife; En La Palma el Castillo de Santa Catalina; Gran Canaria la de Gando y San Pedro; En Fuerteventura el Castillo de El Cotillo y el de Caleta de Fuste; y la Torre del Águila, en Lanzarote.
Los ataques ingleses se multiplicaron en el siglo XVIII, no sólo para conseguir tesoros y saqueos, sino también con la intención de invadir y ocupar islas.
Muchos de estos ataques fueron repelidos en las ciudades más importantes, pero en las islas menores, los piratas tuvieron éxito debido a su debilidad defensiva.
En esta época surgieron corsarios y piratas canarios en el Océano Atlántico que saquearon los barcos británicos, franceses y holandeses que encontraban en aguas canarias, así como en su ruta hacia el Caribe.
Amaro Pargo, que era tinerfeño, fue el corsario más destacado, Felipe V de España se benefició frecuentemente en sus incursiones comerciales y corsarias: recibió una Real Orden dada en el Palacio de El Pardo de Madrid en septiembre de 1714 que le nombraba capitán de un barco comercial con destino a Caracas.
Felipe V también intercedió en la liberación de Amaro durante su detención por la Casa de Contratación de Cádiz y le autorizó a construir un barco para Campeche, que fue armado a bordo.
Fuente de Información: https://es.wikipedia.org/wiki/Pirater%C3%ADa_en_Canarias
Fotografías de Andrés Lemus.
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Si visitas Garachico, recuerda el cumplir con las normas establecidas por las autoridades. Míralas en sus páginas oficiales. No dañes estos espacios y tampoco dejes restos de basura.
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